domingo, 18 de octubre de 2015

Los vecinos


Esta semana me he mudado a una casa nueva. Está muy bien. Tiene dos pisos, tres dormitorios, dos baños, un jardín vallado y una cocina grande. El árbol de la parte de adelante de la casa es lo suficientemente alto y robusto como para bloquear las ventanas del salón desde la calle. La presión del agua es magnífica, los armarios son espaciosos y los suelos de madera son nuevos. El único problema que tengo es que mis vecinos hacen mucho ruido. Nuestras casas están pegadas por un lateral, por lo que compartimos una de las paredes del salón, de una habitación y de la cocina. Todo el día puedo oír los golpes que dan en su cocina, el audio de las películas que ven, sus conversaciones y el llanto de su hijo. Es un poco molesto pero puedo vivir con ello, supongo.
Sin embargo, lo que realmente me inquieta empezó esta mañana cuando estaba en la ducha. Normalmente, me gusta poner música mientras me baño pero hoy prefería disfrutar del silencio. Todo estaba tranquilo hasta que, mientras me lavaba el pelo, oí a mis vecinos hablar desde el otro lado de la pared. No entendía lo que decían pero sonaba raro. Parecía como si estuvieran hablando entre dientes, susurrando, y de vez en cuando riéndose en silencio pero no entendía cómo podía oírlos si estaban diciendo cosas en voz baja. Pensé que debían estar por azar cerca de su lado de la pared para que pudiera escucharlos mientras me duchaba.
No pensé mucho más en este incidente hasta que salí de la casa para ir a trabajar una hora después. Cuando estaba abriendo la puerta del coche, me di la vuelta porque sentía que había olvidado algo. En el momento en el que miré hacia la ventana de mi dormitorio, me di cuenta de que la casa de los vecinos está pegada a la mía en el extremo opuesto al baño. Al otro lado de la ducha está el armario de mi habitación.

Traducido por Nyx.



No hay comentarios:

Publicar un comentario